¿Cómo limpiar una cabeza de ciervo?
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Bien sea porque es un trofeo de casa o porque te lo has conseguido en la sabana, tener una cabeza de ciervo disecada le brinda un toque rustico y a la vez elegante (dependiendo de cómo la exhibas) al lugar donde la quieras colocar.
Sin embargo, hay que tener cuidado a la hora de limpiarlas para que el hueso no se torne amarillo o se coloque poroso y débil y termine por partirse.
¡Aquí te enseñaremos como limpiar una cabeza de ciervo!
¿Por qué limpiar una cabeza de ciervo?
Para que el animal expuesto luzca perfecto sin que se note amarillento ni mucho menos débil. Limpiar una cabeza de ciervo lo haces fácilmente con agua hervida y una buena dosis de agua oxigenada de alto volumen.
Herramientas necesarias
- Olla
- Cuchillo
- Cepillo de cerdas de alambre
- Soda caustica
- Papel higiénico
- Pincel
- Agua oxigenada 200 vol.
Pasos a seguir
- En una olla grande hierve la cabeza de ciervo hasta que todo el tejido que se adhiere este blando
- Con un cuchillo quita todo el tejido blando que puedas
- Cepilla fuertemente hasta raspar el resto de tejidos que puedan quedar en la superficie del hueso, utilizando el cepillo con cerdas de alambre
- Vuelve a hervir con agua limpia y una cucharadita de soda caustica. Debe ser una cantidad muy pequeña para que el hueso no se torne demasiado poroso
- Sácalo de la olla y envuélvelo en papel higiénico
- Con un pincel cúbrelo con agua oxigenada de 200 volúmenes
- Déjala al sol hasta que blanquee
Nota: También puedes dejarla en un hormiguero o enterrarla para que los gusanos la limpien, pero este proceso tarda como mínimo 45 días.