¿Cómo limpiar marfil?
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Las piezas de marfil real mantienen su apariencia durante muchos años, pero no son inmunes a la suciedad o las manchas. Saber cómo limpiar marfil y hacer un mantenimiento adecuado ayudará a que conserve su belleza y durabilidad.
¿Por qué limpiar marfil?
Las piezas de marfil tienen la particularidad de que ofrecen un buen aspecto al lugar donde se encuentran, por lo que una limpieza constante ayuda a que no se le adhiera suciedad ni se formen manchas con el tiempo.
Herramientas necesarias
- Limón.
- Cuchillo afilado.
- Sal.
- Agua.
- Paño suave.
Pasos a seguir
- Lavar un limón y cortarlo a la mitad con ayuda de un cuchillo afilado.
- Separar ambas mitades y agregar una capa de sal a las superficies cortadas.
- Sostener el limón y apoyar la cara cortada y con sal sobre la pieza de mármol. Debemos frotar con suavidad e ir exprimiendo el limón para aprovechar su jugo al máximo. Si es necesario, colocar más sal. Si se exprime una mitad al completo, utilizar la otra mitad.
- Dejar que la pieza de marfil se seque completamente al aire.
- Empapar el paño suave en agua limpia, evitando el exceso de agua. Pasar el paño por todas las superficies de la pieza de marfil, para eliminar los residuos de limón y sal que han quedado sueltos.
- Repetir el paso 4.
- Colocar la pieza en su sitio nuevamente.
De esta manera, no solo se limpia y blanquean piezas de marfil, también se le da una capa extra protectora que evitará las manchas por cierto tiempo. ¡Sostén la pieza con firmeza para evitar caídas o accidentes!