¿Cómo limpiar mi reputación?

¿Cómo limpiar mi reputación?

Nuestra reputación es nuestra marca personal en cualquier parte en la que estemos, ya sea el trabajo, internet, universidad, etc. Por ello, es importante que, como persona individual y capaz, sepa cómo limpiar mi reputación ante cualquier mala fama que se haya creado a mí alrededor.

En muchas ocasiones, esta mala fama se crea sin nuestra intensión, a través de malos comentarios de personas malintencionadas que buscan favorecerse de nuestras desgracias. Por lo que deshacer esta mala reputación puede ser algo difícil de tratar; sin embargo, no debemos limitarnos a esperar que todo pase.

El día de hoy aprenderán a gestionar estas situaciones y cuales son las mejores maneras de resolverlas, en los lugares más comunes y sucedidas por nuestra culpa o la de otros. Continúen leyendo este interesante artículo sobre cómo limpiar la mala fama que se nos ha creado.

¿Cómo hacer para limpiar mi reputación?

Lo primero que debo tener en cuenta para limpiar mi reputación, es si ésta se ha visto afectada por mi propia actitud en forma general o hacia la persona que ha fomentado los malos comentarios. Dicho esto, es importante que empecemos a mantener buenas relaciones con nuestros compañeros, vecinos y amistades.

Es importante que aquellas personas con las que convivimos constantemente, se sientan a gusto con nosotros. Si nuestra actitud anterior ha sido grosera o egoísta, debemos comenzar por hablar con las personas afectadas y conciliar la situación.

También debemos cuidar de nuestra comunicación, tanto personal como digital, manteniendo un tono, vocabulario y opiniones adecuadas. Es muy fácil dejarse llevar por el momento, y si nos hemos pasado de la raya, lo ideal es que nos disculpemos y recobremos la compostura.

En muchas cosas, ser serviciales y estar dispuestos sin esperar nada a cambio es la mejor forma de limpiar la imagen de egoístas o antipáticos que otros puedan pensar. Compartir y participar en las cosas importantes del grupo ayudarán también a vernos como parte del mismo.

Si hemos sufrido por culpa de errores del pasado y nos hemos visto involucrados en eventos que bajan nuestra reputación, lo mejor que podemos hacer es acercarnos con cautela y tratar de conectar de nuevo con los afectados. Incluso las personas nuevas en nuestra vida deben saber que hemos mejorado, cambiado o que los malos comentarios fueron infundados.

¿Cómo limpiar mi mala reputación?

Sufrir de mala reputación es algo muy común en estos días, sobre todo con el auge de las redes sociales y la libertad de expresión desenfrenada, en la que cualquier persona puede decir lo que quiera de otras sin temor a las repercusiones. Gracias a este difícil problema, mi vida puede cambiar por completo, así que es momento de saber cómo limpiar mi reputación.

Para solucionarlo, debemos internalizar que la razón de esta reputación no será olvidada tan fácilmente. Quizá muchos dejen de preocuparse por ese error que cometidos o esa mala opinión que dictaminamos, pero siempre nos recordarán como incompetentes, odiosos, antipáticos, etc.

Muchas veces la mejor solución es alejarnos del problema y dejar que el tiempo lo aclare todo, pero si estamos dispuestos a participar activamente en la solución, debemos comenzar por hablar y sincerarnos con otras personas sobre lo sucedido. Ya sea con las personas que se vieron afectadas, como con otros que puedan esparcir los malos comentarios.

Otra forma de solventar esta situación es cambiando la forma en la que los demás nos ven, ofreciéndoles otra perspectiva. Por ejemplo, quizás eso que no pudimos hacer antes y que nos hizo quedar como incompetentes o egoístas, nos abrió las puertas a un nuevo conocimiento. No obstante, debemos saber que no siempre podremos cambiar la forma de pensar de los demás, y que será difícil hacerlo con los afectados.

¿Cómo limpiar mi mala reputación de acoso?

Ser tildado como acosador sexual es un grave problema, tanto si nosotros mismos hicimos que pensaran eso, como si otra persona nos ha levantado una falsa acusación. En la actualidad, ha habido más despidos por acoso sexual que por otras razones, así que debemos tomar en serio este tema.

Ser el acosador del trabajo hace que todos los presentes se sientan incomodos ante nuestra presencia, por lo que debemos trabajar en nuestra actitud ante los otros. Los chistes sexuales, las miradas lascivas y los comentarios obscenos deben acabarse ahora mismo. Lo siguiente será hablar seriamente con las personas afectadas, ofrecer una disculpa sincera y prometer que este comportamiento no volverá a suceder, acompañándolo con acciones relacionadas.

¿Qué sucede cuando hemos sido víctima de una falsa acusación? Es importante que sepa cómo limpiar mi reputación para estos casos particulares, ya que las cosas pueden ponerse cuesta arriba para mí; en esto juega un papel importante el hecho de que es nuestra palabra contra la de la persona que nos acusa. Es posible que nuestras acciones hayan sido mal interpretadas y si aún no es tarde, lo ideal es explicarnos al respecto.

Si ya la acusación está en curso y tenemos pruebas que la refuten, lo mejor es que las mostremos cuanto antes para limpiar esa grave reputación. Si todo lo anterior falla, nos queda el último recurso: demandar a la persona que nos acusa falsamente por difamación, de ser posible en público.

Hablar en público sobre lo sucedido con nuestros compañeros de trabajo, jefes o compañeros de clase y ser sinceros, es una excelente forma de combatir los malos pensamientos.

¿Cómo limpiar mi reputación en el trabajo?

Formar una buena reputación en el ambiente laboral es tan fácil como formar una mala fama, sobre todo si se trata de un ambiente que nos exige demasiado y nos mantiene estresados 24/7. A pesar de haber comenzado con mal pie, estoy a tiempo de aprender cómo limpiar mi reputación en el trabajo, ya que la mayoría de las personas están dispuestas a darme segundas oportunidades.

Uno de los pasos iniciales es admitir nuestros errores delante de las personas que lo requieran, de manera que podamos dar a conocer nuestro lado humano. Lo siguiente será contribuir al trabajo de otros; sí, cometimos un error, pero el mundo no ha acabado aun, y debemos demostrar que estamos dispuestos a reparar el daño.

Las críticas constructivas a veces pueden hacernos sentir incomodos, pero siempre deben ser recibidas, ya que nos ayudan a ver en qué estamos fallando. Aceptarlas nos hará ver como personas con perspectiva, y dispuestas a cambiar aquello que se considera como deficiente.

A veces las opiniones de nuestros propios compañeros de trabajo, jefes o empleados nos ayudan a mejorar. Mientras tanto, mantener la calma mientras resolvemos la situación es una forma de mostrarnos pacientes y poco agresivos.

¿Cómo limpiar mi reputación en internet?

Se puede decir que la peor de todas las malas reputaciones se encuentra en internet, ya que las malas opiniones y comentarios pueden venir de personas que no conocemos, y que solo buscan molestarnos. En estos casos, aunque los contactemos y le pidamos que retiren su malintencionada opinión, es probable que nos ignoren o, incluso, que empeoremos la situación.

En estos casos particulares podemos hacer uso de nuestros perfiles sociales para hacer constar a nuestras amistades, clientes, seguidores, etc., lo que ha sucedido y como deseamos solucionarlo. A veces estas malas reputaciones provienen de personas que no se han dado la tarea de conocernos, o a nuestro negocio en caso de contar con una marca personal.

También podemos usar las denuncias de cada red social sobre contenido inadecuado, explicando nuestro caso y lo que buscamos en la plataforma en donde nos hemos visto afectados. Además, también tenemos a nuestra disposición la ayuda de Google, para que este contenido negativo ya no aparezca en los resultados de búsqueda.

Por último, puedo utilizar la estrategia más básica: Subo contenido positivo que opaque el contenido negativo, con la intensión de limpiar mi reputación. Por ejemplo, si un cliente comenta que nuestro trato al público no es cordial, podemos pedirles a otros clientes que den su opinión sobre este tema en específico. De esta manera, los visitantes podrán contrastar la información.

Ahora que tengo estas geniales ideas y se cómo limpiar mi reputación laboral, en internet o en forma general, puedo ponerme en marcha y tratar con aquellos a quienes he afectado con mis actitudes. Cuando hablar directamente no funcione, puedo hablar públicamente con aquellos que me quieran escuchar. Poco a poco podremos ver como se nos abre el camino hacia una mejor fama entre aquellos que nos importan.