¿Cómo limpiar los vasos sagrados?
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Los vasos sagrados son la cristalería utilizada durante la misa por los sacerdotes, para repartir el Cuerpo de Cristo y la Sangre de Cristo a los fieles presentes. Tras la ceremonia es bastante común que queden restos de ambos en los vasos sagrados, por lo que se debe proceder inmediatamente a su purificación. Aprende aquí como limpiar los vasos sagrados sin dificultad.
¿Por qué limpiar los vasos sagrados?
Tras la comunión no deben quedar restos sagrados en los vasos sagrados, ya que pueden mancharlos o deteriorarlos. Además, se estaría irrespetando lo sagrado de la ceremonia y la misa. Es importante que la purificación la realice el sacerdote que celebra la misa.
Herramientas necesarias
- Sacerdote.
- Vino.
- Agua.
Pasos a seguir
- Al finalizar la comunión, el sacerdote debe cerrar la ceremonia consumiendo los restos de la Sangre de Cristo que quede en la cristalería. También debe recoger los restos del Cuerpo de Cristo que no hayan sido consumidos.
- Verter una pequeña cantidad de agua y vino dentro de los vasos sagrados.
- Batir ligeramente la mezcla, trazando círculos con los vasos sagrados.
- Beber la mezcla hasta que los vasos sagrados queden totalmente limpios.
- De ser necesario, repetir los pasos 2, 3 y 4 hasta que queden totalmente limpios.
- Permanecer unos minutos en silencio para reverenciar la purificación y reflexiona sobre el ministerio ofrecido.
- Almacenar los vasos sagrados en su lugar.
En caso de que quede mucha Sangre de Cristo después de la ceremonia, el sacerdote puede solicitar ayuda del obispo o de un sacerdote invitado para consumirla antes de la purificación. ¡Recuerda que solo un sacerdote puede realizar la purificación!